Continúa el descenso de la contratación fija

Una vez pasado el verano, y con él su aumento y movilización del empleo, sobre todo en la hostelería y sector servicios, el nuevo curso llega con una bajada importante del número de afiliados a la seguridad y con datos nada satisfactorios de la contratación indefinida.

Agosto interrumpió 4 meses de bajadas consecutivas del desempleo y terminó con 62.083 parados más en las listas. Pero estos datos tienen cierta explicación, ya que el final de la temporada estival siempre genera bajas masivas de cotizantes debido al carácter temporal de los contratos.

Lo que no es tan explicable es la situación de la contratación fija a pesar del plan de incentivación llevado a cabo por el Gobierno. La reforma laboral de junio, que rebajaba la indemnización en caso de despido a 33 días por año trabajado, no está cumpliendo de momento con su tarea y la contratación fija sigue cayendo en picado.

Aunque el verano quizá no sea el período más adecuado para medir la eficacia de un plan de fomento del empleo fijo, ya que la mayor parte del trabajo generado se limita a los meses vacacionales, las cifras son bastante desalentadoras. Ya en julio la contratación fija descendió un 34%, y en agosto la caída de este tipo de contratación laboral llegó al 40%.

Desde el Gobierno, los responsables de Trabajo tratan de restar importancia a estas alarmantes cifras y aseguran que en agosto y con la reforma tan próxima es imposible que se vean ya resultados, pero se muestran muy optimistas con el futuro.

Es cierto que las argumentaciones del Gobierno tienen su punto de razón, pero las primeras cifras recibidas después de las reforma no dejan más que sensaciones desoladoras. Esperemos que con el rodaje y el comienzo del nuevo curso las empresas se animen a dinamizar un poco el parado mercado laboral.